Creo que Betty Halbreich y yo nos llevaríamos muy bien.
Seguimos leyendo su libro...
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| Portada del libro en su edición en inglés. |
Cada dos temporadas las revistas anuncian con gran entusiasmo que se lleva el negro. Si has estado alguna vez en un desfile (fíjate en el público la próxima vez que veas uno por televisión), habrás comprobado que todo el mundo va de negro de los pies a la cabeza. Los gurús de la moda no abandonan nunca el clásico negro, ni siquiera cuando observan a las modelos en otros tonos, escriben sobre el color de la temporada o comentan a los diseñadores lo guapas que están las mujeres con colores. Y hay una buena razón para que estén enamorados del negro; en realidad, hay muchas razones. El negro es bello. Es eterno. Es práctico. Es sexy. Es atractivo. Y, sobre todo, es simple. (...)
Sé que la gente echa mano del negro por las mañanas para no pensar demasiado. Simplifica el vestuario, simplifica las compras y elimina la necesidad de ir con frecuencia a la tintorería (el negro oculta muchos secretos, incluida la suciedad). Si sueles ir de negro no necesitas tener mucha ropa, porque nadie sabe con certeza si llevas lo mismo una y otra vez. Y ahorrarás dinero, puesto que podrás pasar con un bolso (negro, por supuesto) y uno o dos pares de zapatos (también negros). (...)
Si me meto en mi papel de analista de moda, tendría que decir que detrás de todas las razones lógicas y aceptables para ir de negro hay una más oscura que nadie quiere admitir: la inseguridad. Las mujeres, hasta las que en apariencia tienen más confianza en sí mismas, se sienten seguras cuando van de negro. Saben que están bien y que no llaman la atención. (...) Tengo clientas que vienen y me dicen: "Betty, no puedo comprar más cosas negras". Pero normalmente acaban tragándose sus palabras. Se sienten muy seguras del negro y no se atreven a salir de ahí. La cuestión es: ¿cómo puedes romper la barrera del negro sin sentirte demasiado vulnerable? La solución no es pasar al otro extremo de manera radical. Pásate al color gradualmente. Pero no pienses que tienes que olvidarte del negro para siempre. Algunas de las mujeres más elegantes del mundo no lo han hecho... y nunca lo harán.
Cómo saber cuándo has llegado al límite...
1. Ya sabes lo que dicen de los excesos; y tu armario no es una excepción.
2. La gente que apenas te conoce se acerca a ti para darte el pésame.
3. Tus amigos te dicen que estás guapísima cuando llevas algo gris.
4. Ni siquiera tú eres capaz de distinguir tu ropa.
5. Tienes que instalar una lámpara fluorescente en el armario porque con tanta ropa oscura es imposible ver nada.
6. Te resulta aburrido ir de compras porque las prendas negras a las que echas el ojo te empiezan a parecer iguales.
Fragmento del libro "Secretos de una experta del mundo de la Moda"de Betty Halbreich
¿Qué piensas de este color?¿Alguna se considera adicta al negro?
Algunas de las cosas que pienso yo del negro ya las sabes. ¡Feliz domingo!